Colgante de colmillo de facóquero y lapislázuli en una montura artesanal de plata de ley. El proceso de fabricación hace que sea una pieza única y singular, por lo que cualquier modelo presentará ligeras variaciones, tanto en el colmillo como en la montura que realizamos y adaptamos a mano para cada trofeo. El marfil natural de facóquero ha sido trabajado y tratado para una conservación óptima.
Su diseño de sabor étnico incluye un lapislázuli, piedra afín de los signos de Tauro, Sagitario, Cáncer, Capricornio, Acuario y Libra. El Lapislázuli es históricamente la piedra de la sabiduría, una de las más apreciadas por las antiguas civilizaciones como símbolo de pureza, salud, suerte y nobleza. Además se le atribuyen cualidades como a comunicación, paz, serenidad, sabiduría, integridad, iluminación o amplificador del pensamiento entre muchas otras.
El facóquero, facochero o jabalí verrugoso (Phacochoerus africanus y Phacochoerus aethiopicus) se ha cazado históricamente para la subsistencia en África. Sus colmillos de marfil eran aprovechados para la fabricación de collares tradicionales o amuletos, o se utilizaban como objeto de intercambio entre algunas tribus. En la actualidad La Perionda es uno de los pocos fabricantes que incorpora tan tradicional material a sus colecciones de joyería, donde el marfil de facóquero toma absoluto protagonismo. Así creamos joyas con el sabor étnico y ancestral de épocas remotas, cuando pobladores ya utilizaban recursos de los animales que cazaban.
Este material no supone ninguna agresión a los animales o la naturaleza. Aprovechamos este recurso natural, recuperando antiguos trofeos, stocks locales, o muertes habituales en las reservas naturales, dando así una nueva vida a este precioso y tradicional material.
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